Alguna vez leí un libro… en realidad no lo hice, solo fueron unas cuantas páginas y en mi engaño, me atrevo a decirle al resto del mundo que lo he leído completo. Todos sabemos que no es cierto, pero nos gusta continuar con la gran mentira, no sé si es porque somos muy amables o que rayos. Pero no nos gusta despertar a nuestra realidad. Un choque eléctrico nos recorre y mientras nosotros rogando porque nosotros mismos no nos traicionemos, pero igual seguimos haciéndolo.
Debe haber una razón muy buena para encerrarse en su propio mundo de posibilidades mentirosas. Tal vez es que nos importa demasiado lo que los demás opinen ¿a ti te importa? por supuesto que si, a todos nos importa, en menor o mayor cantidad, pero siempre nos importa, el punto es saber la opinión de quien importa.
Preocuparse demasiado por los extraños no es una buena idea, no los conoces y ellos van a tener un criterio muy diferente al tuya, pero igual lo consideras poderoso porque te están viendo justo en este momento, y lo que menos quieres en este mismo momento es que alguien se ría de ti. ¿porque recuerdas que estás viviendo en el presente verdad?
Las preguntas surgen en el presente, tal vez se responden en el futuro, pero por ahora es lo único que tenemos, tenlo siempre bien presente. La única condición es nunca detenerte a descansar, olvida las fábulas si no te gustan, pero no dejes de correr. o caminar como quieras, la persistencia es lo que te va a llevar a donde quieres llegar. Es lo que abrirá las puertas del futuro con las que tanto sueñas todos los días, mi buen inquilino del departamento 302 de la Av. Janiston.
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